FRONTERAS ABIERTAS |
Fronteiras Culturais |
Pablo Rocca *
"Como los tientos de un lazo/ se entrevera nuestra historia", dice una milonga de Jorge Luis Borges. Y en ningún sitio es más claro, más obvio diría, ese "entrevero" que en la frontera. En cualquiera, pero muy especialmente en esta América en la que abraza Argentina, Brasil y Uruguay.
Sin embargo, a lo largo del siglo XX por obra de las perspectivas nacionalistas o por las estrictamente provinciales (o las dos a un mismo tiempo, pues a veces también se sueldan, también se "entreveran") ha podido desconocerse la rotunda verdad de una serie de signos sobre esa identidad que difícilmente quienes la viven la sientan como "otra". Más bien que la cultura ha demostrado la posibilidad de una existencia complementaria de los rasgos o las particularidades locales (empezando por la definición de un ser nacional y de su anclaje en una lengua) con esa entidad que no reconoce límites políticos, o los reconoce a regañadientes.
El siglo XIX fue próspero en esas manifestaciones de intercalación. Los caudillos, como los Saraiva, pelearon de un lado y del otro porque no reconocieron límites demasiado precisos, pues en el sitio de la frontera que estuvieran se sentían en casa. El criollo habitante de la pradera, al que toda una tradición ha llamado "gaucho", formaron en las huestes de esos conductores cimarrones con la nítida conciencia de ser opuestos al poder central, tan absorbente en cualquiera de los tres países. Una literatura, la gauchesca, primero y su heredera la "criollista" o "nativista" después, exaltó y en cierto modo inventó ese tipo humano. Y aunque aún hoy no se ha trabajado el problema con una visión abarcadora, más allá de la mera circulación nacional -pese a los esfuerzos del uruguayo Lauro Ayestarán, el brasileño Guillermino César y el argentino Félix Weimberg-, está la prueba tan visible en la iteración de ciertos tópicos y hasta en la intercalación de portuguesismos (o a la inversa) de castellanismos en la obra de Bartolomé Hidalgo, Hilario Ascasubi, José Monegal, Justino Zavala Muniz, Alcides Maya, Cyro Martins, Sérgio Faraco, Tabajara Ruas, y un largo etcétera que no puede olvidar la poesía popular recogida en Rio Grande do Sul por Simões Lopes Netto y por Augusto Meyer. Casi tanto podría abundarse sobre la música (ahí están las canciones de Alfredo Zitarrosa o las de Vitor Ramil) y la plástica de la región, así como otras manifiestaciones artísticas no necesariamente ligadas a la ancha columna criolla.
El prospecto nacionalista liberal elaborado en el siglo XIX y triunfante en las primeras décadas del que agoniza, frenó por un lado el reconocimiento de estas constancias. Pero, por otra parte, lo regional en América Latina fue asfixiado por la inconclusa y grande idea americanista, que tiene sus fuentes en la obra y el pensamiento de los jefes de la emancipación y en los escritos de José Martí, de Montalvo, de Rodó, de Darío, entre tantos. No estamos, con todo, en una lucha de opuestos. Un fenómeno como el Mercosur hasta ahora, al menos, no ha pasado de muy escasas y presuntamente buenas intenciones sobre la circulación de los productos culturales y sus agentes entre los países miembros del tratado. Poco se ha hecho y menos se ha visto. Como sea, aun dentro del diseño hipotéticamente integrador del Mercosur, la consideración de realidades intermedias queda sumergido debajo del mapa "nacional". Partir de los espacios, a los que llamaría intersticiales, para entendernos mejor en este mundo global, me parece un principio que está instalado, que siempre estuvo y al que sólo falta completar con un proyecto, una teoría y una práctica de trabajo consecuentes. El "Projeto Fronteiras Culturais (Brasil-Uruguai-Argentina)", del "Centro de Estudos de Literatura e Psicanálise Cyro Martins", abre una posibilidad para ese diálogo. Con iniciativas como esta podremos, de una buena vez, sabernos más singulares y distintos en el inevitable -y al fin de cuentas deseable- compromiso universal. Desde la frontera estricta puede observarse (y salirse mejor) hacia el mundo todo, un mundo de fronteras abiertas.
* Pablo Rocca
Links Relacionados: - Sobre Sobre El Príncipe de la Villa, Cyro Martins ( trad. para o espanhol de Pablo Rocca) |